
En los últimos años, y especialmente desde 2023, China ha estado comprando oro de forma constante y silenciosa, a un ritmo que no se veía desde hace décadas. Esta estrategia, que puede parecer simplemente una forma de diversificar reservas, esconde un cambio geopolítico y económico que podría tener consecuencias para todos los que invertimos.
Pero… ¿por qué China está acumulando tanto oro? ¿Qué busca realmente? ¿Y cómo puede esto afectar al dólar, a los mercados y a nuestras decisiones como inversores?
Te lo explicamos todo de forma clara y sencilla.
¿Cuánto oro está comprando China?
China lleva más de 18 meses consecutivos aumentando sus reservas de oro. El Banco Popular de China (su banco central) añade toneladas cada mes, y aunque no publica todos los datos, los analistas estiman que ya supera las 2.500 toneladas oficiales, aunque la cifra real podría ser mucho más alta.
No solo el gobierno está comprando oro: empresas estatales, bancos y particulares también lo están haciendo. Se estima que el país importa cantidades récord desde Suiza, Rusia y África, y que ha reforzado su producción nacional.
Esto no es algo casual, ni una moda pasajera. Es una estrategia planificada, y los motivos son importantes.
¿Por qué China está acumulando oro?
1. Diversificar frente al dólar
China sabe que depende demasiado del dólar estadounidense. Sus reservas internacionales están llenas de bonos del Tesoro de EE. UU., lo que la hace vulnerable a sanciones o decisiones políticas de Washington.
El oro, en cambio, no depende de nadie. Es un activo físico, global y difícil de confiscar.
Al aumentar su proporción en oro, China busca protegerse de posibles conflictos financieros o geopolíticos con Estados Unidos.
2. Prepararse para un nuevo orden financiero
Desde hace años, China quiere que el yuan (su moneda) tenga un papel más importante en el comercio global. Una forma de lograrlo es respaldar su economía con activos sólidos como el oro.
Algunos analistas creen que, en el futuro, China podría incluso respaldar parte de su moneda con oro, lo que daría al yuan más credibilidad internacional frente al dólar.
3. Desconfianza en el sistema actual
China no es la única que está comprando oro. También lo están haciendo países como Rusia, India, Turquía o Brasil. Todos ellos están apostando por menos dependencia del dólar y más reservas en oro.
Esta tendencia refleja una creciente desconfianza hacia el sistema financiero dominado por EE. UU., especialmente tras las sanciones impuestas a Rusia en 2022 y la enorme deuda estadounidense que sigue creciendo.
¿Cómo puede afectar esto a los inversores?
Aunque parezca algo lejano, lo que hace China con el oro puede tener consecuencias muy directas para quienes invertimos, especialmente si operas en bolsa, en materias primas o en criptomonedas.
1. El oro como valor refugio se fortalece
A medida que más países lo compran, el precio del oro tiende a subir.
Si China continúa con su estrategia, podríamos ver nuevos máximos en los próximos años.
Eso convierte al oro en una opción atractiva para inversores que buscan protección frente a crisis o inflación.
2. Debilitamiento del dólar
Si los grandes países empiezan a usar menos dólares y más oro (o monedas locales respaldadas por oro), la demanda del dólar podría caer, afectando a su valor.
Esto influye en muchos activos internacionales que se mueven en dólares, desde el petróleo hasta las acciones tecnológicas.
Y también puede afectar a la inflación global y las políticas monetarias.
3. Nuevas tensiones geopolíticas
El movimiento de China no es solo económico, también es político. Está diciendo al mundo: “Queremos menos dependencia de EE. UU.”.
Esto podría generar nuevas tensiones entre potencias, algo que siempre agita los mercados. Los inversores podrían buscar activos más seguros (como el oro, el franco suizo o incluso Bitcoin) ante cualquier incertidumbre.

¿Deberías invertir en oro tú también?
No se trata de copiar lo que hace China, pero sí de tenerlo en cuenta como parte de una buena estrategia de diversificación.
El oro ha demostrado ser un activo sólido en tiempos de crisis. No da rendimientos como las acciones, pero protege el valor a largo plazo.
Puedes invertir en oro de varias formas:
- Comprando oro físico (monedas o lingotes)
- A través de ETFs de oro, que replican su precio
- Acciones de empresas mineras, que se benefician si sube el oro
- Apps de inversión como Revolut, Bitpanda o Degussa, que permiten comprar fracciones de oro desde el móvil
Eso sí, como siempre: invierte solo una parte de tu capital y entiende bien el producto antes de entrar.
¿Y cómo afecta esto a las criptomonedas?
Curiosamente, lo que está haciendo China con el oro puede beneficiar también al mercado cripto.
¿Por qué? Porque tanto el oro como las criptomonedas representan activos alternativos al sistema tradicional.
Si el dólar se debilita, si los bancos centrales pierden credibilidad o si la inflación aumenta, muchos inversores buscarán refugio en Bitcoin, Ethereum o stablecoins respaldadas por oro.
Además, en algunos países ya se están desarrollando sistemas de pago digitales respaldados por oro o criptoactivos estables, lo que indica que la revolución financiera no será solo con lingotes, sino también digital.
Conclusión
China está apostando fuerte por el oro, y no lo hace por capricho. Es una estrategia a largo plazo, pensada para protegerse, ganar poder y cambiar las reglas del juego financiero mundial.
Como inversores, no podemos ignorar estos movimientos. No se trata de tener miedo, sino de estar informados y adaptarnos.
Diversificar, entender los riesgos geopolíticos y no depender de una sola moneda o activo son claves en esta nueva era.
El oro ha vuelto a ser protagonista. Y China lo sabe.